
Lilia O’Hara
Bruce Springsteen y la E Street Band dieron el tercer concierto de su gira 2024 World Tour, la cual incluye fechas en Estados Unidos, Canadá y Europa y se extiende hasta noviembre.
Decir que el músico es adorado por sus fans en San Diego se queda corto. La Pechanga Arena, con capacidad para 16 100 personas, se llenó a tope el lunes 25 de diciembre.
Con una equilibrada lista de canciones que iba de una pieza con mucho ritmo a una canción lenta llena de nostalgia o melancolía, el concierto de alrededor de tres horas dejó satisfecho al público.
Springsteen ha llegado a un punto en que con casi 60 años de carrera —en el concierto contó que a los 15 años formó la banda juvenil The Castiles en 1965— se ha convertido en una especie de predicador que motiva a la multitud a gritar y a pensar. Su discurso casi místico y sus canciones a ritmo de rock y música soul le dan un aire de sacerdote a Bruce.
La gente disfrutó cada momento del espectáculo y cantó Spirit in the Night, Nightshift, Born to Run y Dancing in the Dark, entre otras. La lista oficial comprendía 27 canciones.
Con toda la experiencia que este cantautor ha acumulado logra literalmente mover masas. Con sus canciones que cuentan historia del hombre común y que muestran los sentimientos a flor de piel, sin caer en baladas fáciles y repetitivas, Bruce tiene un lugar único en el gusto del público maduro.
Entre lo mejor del concierto estuvo que cuando terminó de cantar su lista de Encore, en medio de los aplausos, Springsteen afirmó: “Vamos a regresar”. El rugido de aprobación no se dejó esperar. Las luces generales se encendieron y el público empezó a salir.